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En los últimos meses se venía registrando una disminución en los casos de COVID-19 en Estados Unidos debido en parte a la amplia disponibilidad de vacunas. Pero ahora la cantidad de nuevos casos diarios está volviendo a aumentar. Voceros de Pfizer se reunieron con personas expertas en vacunas y autoridades estadounidenses para solicitar una autorización de emergencia para la aplicación de una segunda dosis de refuerzo de su vacuna. Esto sucede mientras gente experta en salud pública sigue advirtiendo acerca de la creciente brecha que hay entre los países ricos y de bajos ingresos en la administración de vacunas. “En Estados Unidos tenemos acceso a múltiples vacunas”, dice el Dr. Abraar Karan, médico especializado en medicina interna e investigador de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford. “Muchos países no han visto ni siquiera una dosis”. También dice que es demasiado pronto para determinar si es necesaria una tercera dosis de esta vacuna, como insiste Pfizer. “Espero que las decisiones se basen en investigaciones científicas y no en cuestiones financieras”, señala.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) nuestra conversación con el Dr. Abraar Karan.
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