El New York Times reveló que los entrenadores militares de Guantánamo basaron toda una clase de interrogaciones en técnicas chinas que habían sido aplicadas a prisioneros estadounidenses en la Guerra de Corea. Se considera desde hace tiempo que estas técnicas constituyen formas de tortura. Las mismas incluyen, entre otras, privación de sueño, coacción prolongada, exposición, privación casi absoluta de alimentos y explotación de heridas. Entre los efectos buscados están el “hacer que la víctima sea dependiente del interrogador”, “debilitar la capacidad mental y física de resistencia” y “reducir al prisionero a preocupaciones de’nivel animal’”. También se consideró que los métodos tienen una eficacia casi nula, al haber obtenido mayoritariamente confesiones falsas. Las técnicas fueron presentadas en una gráfica de un estudio de la Fuerza Aérea de 1957, titulado “Intentos comunistas de obtener confesiones falsas de prisioneros de guerra de la Fuerza Aérea”. Algunos de estos métodos fueron aplicados a prisioneros de Guantánamo hasta que en 2005 el Congreso prohibió el uso de coerción.
Entrenadores de Guantánamo basaron sus interrogaciones en técnicas chinas
Titular02 Jul. 2008