La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas aprobó una resolución el viernes que exige que Israel y los palestinos lleven a cabo investigaciones imparciales sobre los crímenes de guerra cometidos durante el ataque israelí contra Gaza el año pasado, documentados en el informe Goldstone. Estados Unidos, junto con Canadá, Nauru, Panamá, Macedonia y Micronesia se unieron a Israel para votar en contra de la resolución. El embajador adjunto estadounidense Alejandro Wolff reiteró la opinión de Estados Unidos de que el informe Goldstone esta “plagado de errores”.
Alejandro Wolff dijo: “Previamente hemos notado defectos que incluyen el enfoque desproporcionado en Israel, las conclusiones negativas que saca sobre las intenciones y acciones de Israel, el no lograr manejar adecuadamente la naturaleza asimétrica del conflicto de Gaza y el no atribuirle la debida responsabilidad a Hamas por atacar deliberadamente a civiles y por asentarse y llevar a cabo sus operaciones en áreas urbanas densamente pobladas por civiles”.
El observador permanente de la Autoridad Nacional Palestina ante la ONU, Riyad Mansour, criticó a Israel y exigió que se tomaran medidas.
Riyad Mansour dijo: “Israel actuó por sobre la ley, infligiendo un sufrimiento y una devastación incalculables al pueblo palestino. Ha reprimido durante más de cuatro décadas en el territorio palestino ocupado, inclusive en Jerusalén Oriental, y ha socavado gravemente la aplicabilidad y la credibilidad de las leyes internacionales. Ya es tiempo de poner fin y cambiar este patrón de comportamiento destructivo, escandaloso de Israel, y eso empieza por asegurar que se responsabilice a los culpables, castigándolos por perpetrar crímenes de guerra contra civiles inocentes, y asegurar que haya justicia para todas las víctimas de esos crímenes”.