En la Bahía de Guantánamo, un prisionero canadiense boicoteó su audiencia de presentación de pruebas el jueves, tras negarse a utilizar gafas que le taparan la visión y orejeras que no le permitieran escuchar mientras era transportado desde su celda. Esta audiencia se lleva a cabo para considerar las afirmaciones de Omar Khadr de que fue torturado para que diera una confesión falsa de haber matado a un soldado estadounidense en Afganistán. Khadr tenía quince años cuando los soldados estadounidenses lo encarcelaron, en el año 2002. Según dice, los guardias militares estadounidenses lo golpearon y amenazaron con violarlo cuando llegó a Guantánamo ese mismo año. El abogado defensor Barry Coburn afirmó que Khadr aún sigue siendo maltratado.
Coburn dijo: “Estamos sumamente preocupados por lo que el Sr. Khadr está sufriendo y creo que probablemente fue evidente para todos en la sala de tribunales que aparentemente estaba extremadamente dolorido, y creo que en cierto momento incluso llegó a llorar. Es decir, la idea de colocarle gafas oscuras ajustadas a una persona en este estado físico es algo, sin ponerle necesariamente ningún rótulo en particular, es algo que me resulta extremadamente difícil de entender”.
Luego Khadr asistió a la sesión de la tarde, donde ocasionalmente rompió en llanto. Está programado que sea enjuiciado este año en el primer tribunal militar del gobierno de Obama.