En el día de hoy, el comité gubernamental israelí que investiga el ataque contra la flotilla celebra sus primeras reuniones. En las Naciones Unidas, el Relator Especial para los Territorios Palestinos Ocupados del Consejo de Derechos Humanos, Richard Falk, criticó a Israel por rechazar una investigación internacional.
Falk afirmó: “Soy bastante escéptico, y mi escepticismo es reforzado por la investigación sobre la operación ‘Plomo fundido’ [que designa el ataque israelí contra Gaza en enero de 2009], en la que la infracción más grave que se encontró fue el presunto robo de una tarjeta de crédito realizado por un soldado israelí. Ninguna de las graves acusaciones sobre la utilización de tácticas y armamento y el ataque en sí mismo fueron sometidas a ningún tipo de análisis objetivo”.