Ex prisioneros de Guantánamo y asesores legales se reunieron en Londres el martes para un evento de conmemoración del décimo aniversario de la prisión militar de Estados Unidos en Guantánamo. Moazzam Begg, que pasó casi tres años detenido por este país sin acusación, estuvo entre los oradores.
Moazzam Begg manifestó: “¿Qué significan los diez años de Guantánamo? Es un aniversario, y nos encanta celebrar aniversarios en Occidente, ¿no? Y éste es un aniversario de tragedia, dolor, tormento, familias desgarradas, una página oscura en la historia moderna de la humanidad. Es una historia de niños detenidos, de amputados detenidos, de ancianos, de personas detenidas sin cargos ni proceso durante una década por la nación más poderosa y democrática del mundo, que habla de libertad”.
El aniversario se cumple inmediatamente después de la reciente sanción del Presidente Obama de la Ley de Autorización de Defensa Nacional, que dispone la detención militar por tiempo indeterminado de los sospechosos de pertenecer a Al Qaeda y dificultaría aún más la liberación de los detenidos en Guantánamo. Clive Stafford-Smith, de la organización benéfica Reprieve, dijo que docenas de presos de Guantánamo seguirán tras las rejas a pesar de que ya se dispuso su liberación.
Stafford Smith expresó: “Supongo que la tragedia en este momento, al menos una de las tragedias, es la de 171 prisioneros de Guantánamo, de los cuales se ha dispuesto la liberación de más de la mitad (89 según las mejores estimaciones). Esto es extraordinario; no lo digo yo, sino que primero el gobierno de [George W.] Bush en un gran número de esos casos y luego el gobierno de Obama dijeron que esas personas no eran una amenaza para Occidente y que debían ser liberadas”.
Los prisioneros de Guantánamo también hablaron en eventos públicos realizados en otras ciudades. En Francia, Amnistía Internacional dijo que hay dos prisioneros argelinos que viven virtualmente en la indigencia luego de haber sido liberados de Guantánamo. La organización reclama al gobierno francés que entregue los pagos que recibe de Estados Unidos por aceptar prisioneros tras su liberación. Uno de los prisioneros, Lakhdar Boumediene, habló sobre su dura experiencia.
Boumediene dijo: “Lo que recuerdo de Guantánamo es una situación muy difícil porque la primera vez que estuve preso allí, no como en Bosnia o Francia, estaba muy enfermo; recuerdo la tortura, la celda. No me puedo olvidar nunca de Guantánamo, nunca; lo intento, pero no puedo”.