Estados Unidos ha transferido a los últimos tres prisioneros uigures chinos de Guantánamo a Eslovaquia, cinco años después de que un juez dictaminara que su detención era ilegal. Los uigures son miembros de una minoría musulmana que es perseguida en China. Habían estado retenidos por más de una década sin pruebas de vinculación a grupos terroristas. Otros 19 prisioneros uigures que habían sido retenidos en Guantánamo ya han sido reubicados en cinco otros países. El jueves, la portavoz adjunta del Departamento de Estado, Marie Harf, alabó las transferencias como parte de un envión para cerrar Guantánamo.
Marie Harf expresó: “El gobierno de Estados Unidos determinó hace tiempo que no pretende detener a estas personas, los uigur, como combatientes enemigos. Los últimos en ser liberados se encontraban entre los 17 detenidos uigur cuya liberación de Guantánamo fue determinada por un tribunal federal estadounidense en el año 2008. Durante mucho tiempo hemos mantenido nuestra postura de no repatriar a los uigur a China desde Guantánamo debido a nuestras políticas de trato humano. Como hemos dicho además, estamos haciendo todo lo posible para reducir la población de detenidos en Guantánamo y verdaderamente esperamos que estos recientes traslados constituyan un importante paso hacia la consecución de dicho objetivo”.
Otros ocho prisioneros fueron trasladados de Guantánamo desde agosto, pero 155 aún permanecen allí.