El presidente Barack Obama ha cumplido con su promesa de vetar un proyecto de ley de gasto militar de 612.000 millones de dólares aprobado por los republicanos del Congreso. La medida hubiera permitido al Pentágono eludir recortes de presupuesto obligatorios para el Departamento de Defensa, conocidos como “secuestro de gastos”, pero los recortes hubieran seguido vigentes para los programas nacionales. El proyecto de ley también haría más difícil el cierre de la cárcel de Guantánamo.
Obama expresó: “Lo voy a volver a remitir al Congreso y mi mensaje para ellos es muy simple: ‘Hagámoslo bien’. Estamos en plenas negociaciones en torno al presupuesto. Vamos a establecer un presupuesto que destine los fondos apropiados a nuestra seguridad nacional y a nuestra seguridad económica. Asegurémonos de ser capaces de reformar nuestro gasto militar de manera constructiva, de hacerlo sostenible a largo plazo y asegurémonos de hacerlo de manera responsable, podemos reducir la población de Guantánamo, garantizar que el pueblo estadounidense se encuentre a salvo y asegurarnos de no brindar a los terroristas ese tipo de herramientas de reclutamiento que resultan tan peligrosas”.